¿Cuándo se recomienda un quiropráctico y Quién no puede ir al quiropráctico?

¿Cuándo se recomienda un quiropráctico?

Se puede recomendar un quiropráctico para:

• Dolor de espalda o cuello: especialmente si se cree que está relacionado con la columna vertebral.
• Dolores de cabeza: especialmente si se cree que están relacionados con la tensión muscular o la desalineación de la columna vertebral.
• Fatiga crónica: la quiropráctica puede ayudar a mejorar la circulación y la función del sistema nervioso, lo que puede aumentar los niveles de energía.
• Problemas de equilibrio o mareos: la quiropráctica puede ayudar a mejorar la alineación de la columna vertebral y la función del sistema vestibular, lo que puede mejorar el equilibrio.
• Ciática: la quiropráctica puede ayudar a aliviar la presión sobre el nervio ciático, lo que puede reducir el dolor y la inflamación.

Es importante tener en cuenta que la quiropráctica no es una solución para todas las condiciones. Si tiene una afección grave, como una enfermedad cardíaca o cáncer, consulte con su médico antes de ver a un quiropráctico.

Aquí hay algunos consejos para elegir un quiropráctico:

• Pida recomendaciones a su médico o amigos.
• Busque un quiropráctico con licencia y experiencia.
• Pregunte sobre las técnicas que utiliza el quiropráctico.
• Asegúrese de sentirse cómodo con el quiropráctico antes de comenzar el tratamiento.

¿Quién no puede ir al quiropráctico?

No se recomienda la quiropráctica para las siguientes personas:

• Personas con osteoporosis grave: los ajustes quiroprácticos pueden aumentar el riesgo de fracturas.
• Personas con artritis reumatoide: los ajustes quiroprácticos pueden agravar la inflamación y el dolor.
• Personas con tumores en la columna vertebral: los ajustes quiroprácticos pueden interferir con el tratamiento del tumor.
• Personas con enfermedades neurológicas graves: los ajustes quiroprácticos pueden empeorar los síntomas.
• Mujeres embarazadas: los ajustes quiroprácticos pueden ser incómodos para las mujeres embarazadas y pueden aumentar el riesgo de complicaciones.

Si tiene alguna condición médica, es importante consultar con su médico antes de ver a un quiropráctico.

En resumen:

• La quiropráctica puede ser una opción eficaz para algunas personas con dolor de espalda, cuello, dolores de cabeza, fatiga crónica, problemas de equilibrio o mareos.
• No se recomienda la quiropráctica para personas con osteoporosis grave, artritis reumatoide, tumores en la columna vertebral, enfermedades neurológicas graves o mujeres embarazadas.
• Es importante consultar con un médico antes de ver a un quiropráctico, especialmente si tiene una condición médica.